viernes, 9 de julio de 2010

Al que madruga, patada en la boca.

Y una vez mas estamos aqui, a esta dichosa hora en la que me da por saltar gritar y patalear... en mi imaginación, por que si hiciera todo esto ahora, el mundo me llamaría loco, y con razón, tal que así me encerrarian en una especie de manicomio, en el cual... espera.. tendría la vida resuelta :S

¿Como no se me habria ocurrido antes?

Quizas es por que llevo despierto desde las seis y a esa hora el riego no me llega correctamente...

O puede ser de tantos cafés, que me ponen a volar por las nubes aunque tenga los pies en cemento.
Al fin y al cabo, madrugar tiene su recompensa, un extraño sabor de boca, un ligero dolor de espalda, un hormigueo en la pierna y unas legañas de espanto....

Voy a la ducha, que arrastra todos los males mientras refresca cuerpo y mente.

Y los amaneceres, que no me los quite nadie que lo reviento, la forma de reventarlo la dejo a mi elección, depende de la persoa y cirscunstancia.

Yo soy yo, y mi circunstancia.

1 comentario: